El CatoblepasSeparata de la revista El Catoblepas • ISSN 1579-3974
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El Catoblepas · número 208 · julio-septiembre 2024 · página 1
Artículos

Premio Libertas Oviedo 2024

Tomás García López

Glosa de la Fundación Gustavo Bueno


(Nota: Texto íntegro del discurso pronunciado en el Auditorio Príncipe Felipe de Oviedo el 29 de mayo de 2024, a modo de glosa de la Fundación Gustavo Bueno, en la entrega del Premio LIBERTAS Oviedo 2024 otorgado a la Fundación Gustavo Bueno, y del que no se leyeron, por “imperativo temporal”, los fragmentos que figuran entre corchetes.)

Señor Alcalde (Señor Teniente de Alcalde)

Señor Presidente de Sociedad Civil Oviedo 21.

Señores asistentes a la entrega de los Premios LIBERTAS 2024.

Conmemoramos este año el centenario del nacimiento del gran filósofo español Gustavo Bueno Martínez, que es, a nuestro juicio, el mejor filósofo del siglo.

Aunque naciera en Santo Domingo de la Calzada –“borde oriental del antiguo reino de Alfonso II el Casto”–, OVIEDO, civitas regia, se convirtió en su segunda “patria chica”, porque fue en esta ciudad imperial donde ejerció, sin solución de continuidad su alargado y magnífico magisterio filosófico, primero como profesor en la Universidad de Oviedo (de 1960 a 1998), y a partir de 1998 hasta la fecha de su fallecimiento (acaecido el 7 de agosto de 2016) como Escolarca o Director de la Fundación que lleva su nombre y que hoy es motivo de reconocimiento.

Su estrecho vínculo con la ciudad de Oviedo –una de cuyas instituciones, Sociedad Civil Oviedo 21 es la causante de este importante reconocimiento a su labor dentro de ella– ya se materializó en tiempos de Don Gabino de Lorenzo pues Gustavo Bueno Martínez fue nombrado “Hijo adoptivo de Oviedo”, nombramiento éste que el filósofo agradeció con un sincero y profundo discurso pronunciado durante la ceremonia de su proclamación como “Hijo adoptivo de la ciudad de Oviedo”. Discurso en el que después de probar la importancia histórica de Oviedo como germen de la grandeza imperial española terminó con estas palabras:

“Creo haber demostrado las razones por las cuales me siento orgulloso, con orgullo no vulgar, al haber sido nombrado hijo adoptivo de Oviedo. Para un meteco que vino a esta ciudad hace casi cuarenta años, atraído por su prestigio histórico, terminar siendo reconocido como hijo suyo por ella, no puede haber orgullo mayor ni, por tanto, mayor gratitud a quienes han sido causantes de este orgullo, a vosotros. He dicho.” (Oviedo, 21 de diciembre de 1995, Gustavo Bueno).

Su persona vive entre nosotros no sólo por medio de la Fundación Gustavo Bueno, sino también por sus más de cuarenta libros, a cual más agudo e interesante, algunos de los cuales han sido traducidos al inglés, al alemán o al chino, por sus numerosos artículos en importantes Revistas y Periódicos, por sus muchas lecciones y teselas, por sus Rasguños mensuales durante doce años… &c., que versan sobre: Filosofía de la Ciencia, Filosofía política, Filosofía de la Religión, Filosofía del Arte, Filosofía de la Técnica y de la Tecnología, Antropología filosófica, Filosofía moral, Filosofía de la Guerra, Filosofía de la Globalización, Filosofía de la Felicidad, Filosofía de la Televisión, Historia filosófica de la Filosofía… Parafraseando a Terencio en este punto, podríamos decir sin ánimo de ser exhaustivos que: “Nada de lo humano y lo divino le fue ajeno a don Gustavo”. [Homo sum, humani hihil a me alienum, (Publio Terencio, Heautontimorumenos, 165 a. C.)]

Tomamos a Publio Terencio Afro o Africano (¿185? – 159 a. C.) como ejemplo de formato referencial del sujeto esencial LIBERTAS (liber-tas), porque pasó de ser esclavo del senador romano Terencio Lucano a LIBERTO, en reconocimiento al buen uso que hizo de su “libertad para” escribir.

El resultado de la influencia filosófica de Don Gustavo, que durante esos cincuenta y seis años (casi seis décadas) de vida en la ciudad de Oviedo y la que sigue ejerciendo tras su fallecimiento a través de su obra y de la Fundación Gustavo Bueno, ha sido la aparición sucesiva de cinco oleadas (en cinco décadas) de seguidores suyos, y hoy día se cuentan por cientos los trabajos y estudios realizados desde su potente Sistema, El Materialismo Filosófico.

Hablamos de oleadas y no de generaciones porque el término orteguiano de Generación no sirve para dar cuenta de esta significativa difusión del Materialismo Filosófico de Gustavo Bueno.

En realidad, el término Generación fue acuñado por Terencio: “Per quindecim annos, grande mortalis aevi spatium” [El intervalo de quince años, grande es en la vida de un hombre], y Ortega y Gasset, admitiendo esta autoría, aplica, a su manera, la sentencia de Terencio a la Historia de la Ciencia: Generación de Galileo, o a la Historia de la Filosofía: Generación de Descartes:

[“Para esto se busca la figura que con mayor evidencia represente los caracteres sustantivos del periodo. En nuestro caso, no parece discutible que ese hombre es Descartes… Anotamos la fecha en la que Descartes cumplió los treinta años: 1626. Esa será la fecha de la generación de Descartes –punto de partida para fijar a uno y otro lado las demás, sin más que añadir o restar grupos de quince años–. Así la fecha de la próxima generación anterior es 1611, que es la generación de Hobbes, de Hugo Grocio; luego 1596, que sea dicho de paso, es la generación de Galileo, de Keplero y de Bacon… Pues esa diferencia de nivel vital es lo que llamo una generación… Cada quince años cambia el cariz de la vida… Durante quince años, etapa muy importante es la vida del hombre (sic)… Hoy creo que esa frase enigmática queda suficientemente esclarecida”. (Ortega y Gasset, En torno a Galileo, lección IV, El método de las generaciones en la Historia, Espasa Calpe, segunda edición, 1984, págs. 70, 72 y 73)].

[Y a partir de estos “axiomas” orteguianos, trasladados a un grupo, cuya estructura esté marcada por la relación: maestro-discípulos, o filósofo ilustre-seguidores, podríamos concluir que la enigmática frase de Terencio se metamorfosea en este aforismo: “En el intervalo de quince años, grandes hombres vivieron”, como resultado de una paráfrasis permutada, y podríamos hablar así, mutatis mutandis, en buena lógica orteguiana, de la “Generación de Gustavo Bueno”]

Pero esta sentencia no sirve para nuestro caso, porque muchos de los seguidores de Gustavo Bueno: sean jóvenes o adultos, profesores o alumnos, científicos o filósofos, artista o artesanos, periodistas o juristas…, por citar algunas agrupaciones, realmente implicadas en la mencionada difusión, ni tienen una edad comprendida en el intervalo de esos quince años, ni han tenido “contacto vital” con Don Gustavo, como gustaba decir Ortega para sus generaciones, [“El concepto de generación no implica, pues, primariamente más que estas dos notas: tener la misma edad y tener algún contacto vital.” (Ortega y Gasset, op. cit. Lección III, La idea de generación, pág. 48)].

Pues bien, La Fundación Gustavo Bueno sirve de nexo entre la Filosofía de Gustavo Bueno y sus muchos alumnos y seguidores, provenientes de todas las partes de España y de muchas partes de Naciones Hispanoamericanas, que estudian, aplican y desarrollan sus doctrinas filosóficas, sin impedimentos administrativos o trabas burocráticas.

Fue también en tiempos de Don Gabino de Lorenzo en los que tuvo lugar la concesión del Edificio Miñor (el 23 de octubre de 1998) como sede para la Fundación Gustavo Bueno. Y ha sido en tiempos de Don Alfredo Canteli en los que se ha otorgado al emplazamiento y entorno de este edificio la denominación de Plaza Gustavo Bueno (el 3 de septiembre de 2022).

Podríamos decir sin temor alguno a equivocarnos que este Edificio y esta Plaza son la “reencarnación” de la Academia platónica  y del Foro socrático, hasta el punto de atrevernos a decir que Oviedo, además de ciudad imperial, es la ciudad filosófica por antonomasia del presente en marcha, como la Atenas de Sócrates y Platón lo fue del mundo antiguo; Y podemos asegurar que todo el recinto de esta Institución es un espacio de “Libertad para” filosofar y para producir obras de Filosofía.

Creemos, modestamente, que Sociedad Civil Oviedo 21 acierta al reconocer al gran filósofo Gustavo Bueno y a su Fundación.

Este galardón nos obliga a mantener muy alto el “listón filosófico” para ganarnos así la confianza de nuestros benefactores ¡a mayor gloria de la Ciudad de Oviedo!

Por ello, Gustavo Bueno Sánchez, Director de la Fundación y Presidente de su Patronato, hijo y sucesor de Gustavo Bueno Martínez, trabaja denodadamente en la programación, organización, coordinación y realización de numerosos actos, cursos y publicaciones, destinadas al mantenimiento del “fuego de la Filosofía crítica” que nos caracteriza, y que arranca del Teatro Crítico del padre Feijoo.

Estas actividades van desde:

Las Lecciones semanales en la Escuela de Filosofía de Oviedo (EFO),  que es una Institución a la que son invitadas personas que destacan: bien por la publicación de algún libro, bien por estar inmersas en alguna investigación, o por otros motivos similares, a impartir una lección sobre un tema de su incumbencia, tras la cual se realiza un coloquio, en el que puede participar cualquier asistente. Las sesiones tienen lugar en el Salón de Actos de la Fundación Gustavo Bueno todos los lunes del año; Comienzan a las cinco de la tarde, y, con frecuencia, el coloquio se  alarga hasta las nueve de la tarde-noche.

Los Encuentros de Filosofía (antes anuales en Oviedo, y ahora bianuales en Oviedo y Salamanca), que son unas reuniones en las que durante tres días se presentan comunicaciones voluntarias sobre un tema propuesto, como pueda ser: Nación y Nacionalismo, Educación y adoctrinamiento en tiempos de Guerra o Infanticidio, Suicidio y Eutanasia, por citar tres de las últimas propuestas. Naturalmente, tras las comunicaciones hay coloquio.

Los Cursos de Filosofía de Santo Domingo de la Calzada, que son una modalidad de ejercicio filosófico, en la que durante una semana del mes de julio de cada año, en sesiones de mañana y tarde, con lecciones matinales para alumnos matriculados en el curso, mesas redondas, y sesiones vespertinas abiertas al público de Santo Domingo de la Calzada, son abordadas cuestiones de interés filosófico como por ejemplo el estudio y análisis de obras emblemáticas de Gustavo Bueno como Ensayos materialistas o El animal divino; o tratamientos problemáticos como Las  Ciencias y las Artes frente al Materialismo filosófico o El Estado del Bienestar, por citar algunos de los títulos de cursos realizados después del fallecimiento de Don Gustavo. Y en vida del Maestro estos otros: Guerra y Democracia, El Reino de la Cultura, La Música, La Televisión, El Periodismo, La Ciudad, La filosofía de la Ciencia…, cursos estos últimos en los que las conferencias y las intervenciones de Gustavo Bueno fueron paradigmáticas.

Y de estas actividades reseñadas es obligado referirnos a las numerosas publicaciones de libros, empezando, naturalmente, por las Obras Completas de Gustavo Bueno, y continuando por los escritos de sus alumnos y seguidores, en la Editorial Pentalfa Ediciones de nuestra propiedad; o a las también numerosas publicaciones de artículos en las Revistas de la Fundación Gustavo Bueno: El Basilisco, y El Catoblepas, así como en otras páginas como Filosofía en Español.

Permítasenos, para terminar esta breve glosa, que desde la Filosofía política y la Filosofía de la Religión del Materialismo Filosófico de Gustavo Bueno, nos congratulemos y felicitemos también a Sociedad Civil Oviedo 21 por el acierto en otorgar los otros tres premios LIBERTAS 2024, [Premio LIBERTAS Asturias a la Fundación Foro Jovellanos, Premio LIBERTAS España a Sociedad Civil Catalana, y Premio LIBERTAS Internacional al obispo nicaragüense Excelentísimo y Reverendísimo Sr. Don Rolando Álvarez Lagos] pues ha sabido apreciar, a nuestro juicio, desde la ciudad de Oviedo, la realidad de Asturias, la de España y la del Mundo entero: Porque Jovellanos es uno de los padres de la Nación política española; Porque Sociedad Civil Catalana es una garantía para el mantenimiento de la unidad de España frente al peligro de fragmentación; Y porque “Dios salva la Razón” de las arbitrariedades de los poderes políticos a través, en este caso, de la Iglesia nicaragüense, que extiende su “manto protector”, a la manera de una verdadera Sociedad Civil, [en este caso, frente al régimen de Daniel Ortega].

[CODA]

¡Feijoo habló para toda España desde Oviedo, Gustavo Bueno, con su obra y su Fundación, habla también desde Oviedo para toda España, para toda Hispanoamérica y para todo el mundo que quiera salir de la “caverna”!

En Oviedo a 29 de mayo de 2024.

El Catoblepas
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